Eduardo Montero es profesor asistente en la Harris School of Public Policy de la Universidad de Chicago. Originario de Costa Rica, su investigación se centra en comprender cómo las instituciones y la cultura afectan el desarrollo y la política de desarrollo en América Central y África Central. Sus intereses más amplios se relacionan con la economía del desarrollo, la economía política, la historia económica y las intersecciones entre estos temas interrelacionados. figuró como invitado en Ceteris Paribus bajo la dirección del economista y host Ángel Alvarado para conversar sobre las consecuencias económicas de las fiestas patronales o las festividades religiosas en los pueblos de México y el efecto que esto ha tenido sobre el desempeño económico, en este caso de México en el largo plazo.
Angel Alvarado: Las fiestas patronales o fiesta festividades religiosas son algo bien importante en la cultura latinoamericana. Normalmente las fiestas; estas fiestas patronales son las fiestas del pueblo. Sin embargo, estas fiestas podrían haber afectado el desempeño económico de algunos pueblos cuando esas fiestas coinciden con la mayor actividad económica o en este caso, con la temporada de siembra o con la temporada de cosecha de algunas localidades, afectando o pudiendo afectar la productividad en el largo plazo, e incluso la transformación económica de esas de esas regiones en el siglo en el siglo XX. ¿Qué son las fiestas patronales o los festivales religiosas en México? ¿Quién introduce estas fiestas religiosas?
Eduardo Montero: Esto es algo muy importante para Latinoamérica, la cultura latina o española, estas fiestas patronales, lo que son básicamente en México y muchos otros países católicos o con influencia católica, los pueblos celebran el día del Santo patrón.
En México y muchos otros países católicos romanos, los pueblos y ciudades celebran el «día del santo patrón» de un santo en particular u otra figura sagrada que se ha asociado históricamente con el pueblo. Cientos de santos o figuras tienen sus días de celebración que se reparten a lo largo del año, en fechas fijadas por la iglesia católica en el Vaticano Por ejemplo, pueblos cuyo santo patrón es San Francisco celebran su fiesta patronal el 4 de octubre. Estas fiestas tienen sus días de celebración a través del calendario católico por parte de los hogares locales y muchas veces por los gobiernos locales también.
Estas fiestas patronales generalmente son días festivos locales e involucran tiempo y gastos financieros sustanciales por parte de los hogares locales y gobiernos.
Los santos patronos fueron establecidos por los colonizadores españoles, hace siglos, y permanecieron establecidos a partir de entonces. Forman parte de los esfuerzos por convertir a las poblaciones locales al catolicismo. Se dice que las fiestas patronales se convirtieron en “una de las actividades más importantes de los gobiernos municipales». en los primeros siglos de la conquista, mezclaban las tradiciones locales como música, bailes, que eran un poco más fácil mezclar con las tradiciones locales; tal vez por eso fueron tan grandes y populares y han persistido por tanto tiempo; mientras que otras tradiciones religiosas que trajeron los españoles, esos eran un poco más, tal vez raras o diferentes, como ir a misa en latín. Por ejemplo, yo soy, estamos hablando antes de empezar, soy de Costa Rica, allá también tenemos muchas fiestas patronales, antes la llamaban turnos, entonces cada pueblo tenía, digamos, turno de celebración y la gente iba a diferentes pueblos para celebrar, y también en México eran muy importante a través de la historia para estas celebraciones en honor del Santo la Virgen del del pueblo.
Angel Alvarado: Esto, esto es un tema realmente muy latinoamericano y muchos colores y mucha fiesta y mucha comida y mucha bebida. como tú decías la misa en latín básicamente no era algo central en la fiesta, lo central era la fiesta en sí misma, la música, dependiendo de cada región y entonces diciendo eso: ¿cómo se relaciona esa gran fiesta que podría durar una semana o varias semanas? ¿cómo era esa fiesta, qué impacto tuvo esa fiesta en el desarrollo económico, en el desempeño económico de estos pueblos, en el momento en la fiesta y en el desarrollo a las décadas siguientes y los siglos siguientes? ¿Qué relación tiene estas festividades en la promoción del desarrollo económico? ¿Qué pasa cuando la fiesta del pueblo coincide la con el tiempo de siembra o de cosecha?
Eduardo Montero: Este es un estudio que estaba trabajando con Jean de la Universidad de Michigan que es de las filipinas, donde también tienen cómo estas celebraciones. Porque los españoles también estuvieron ahí mucho tiempo. Y hablando, empezamos a hablar de estas fiestas patronales que existían y sentimos que no se había estudiado mucho, especialmente como el aspecto económico que pueden tener en el desarrollo a largo plazo.
Y empezamos a leer un poco de este tema, encontramos unos argumentos de antropólogos que hablaban de que estos festivales podrían tener impactos negativos a largo plazo, básicamente porque tenían enormes cargas económicas para la gente que organizaba estos festivales que eran como impuestos por los españoles en poblaciones locales y hablaban de que particularmente podrían tener efectos negativos, si los festivales coinciden con las temporadas agrícolas, por ejemplo: tiempo de siembra, tiempo de cosecha. Entonces eso nos pareció muy interesante y quisimos estudiar para ver que pasaba, si los festivales que los españoles decidieron asignar en temporadas de siembra o cosecha, sin entender muy bien el clima local o el calendario agrícola en ese momento.
¿Qué impacto estuvieron a largo plazo? Entonces, lo que hacemos básicamente es y aprovechamos dos cosas del del contexto mexicano. En primer lugar, hay mucha variación a través de los pueblos de los municipios. ¿En cuáles son los Santos patronos? ¿Y cuándo ocurren las fiestas patronales? Algunos ocurren en diciembre, otros en junio, entonces hay mucha variación, pero el otro que también es muy interesante en México, es que hay mucha variación en el calendario agrícola. Entonces, cuando son los tiempos de siembra y cosecha. También hay mucha variación a través de municipios, entonces eso nos da un poco de variación en épocas cuando un festival coincide con estas estos calendarios agrícolas y otras fiestas, cuando no haya esta conciencia para tratar de entender qué impactos tienen estos festivales que coinciden con calendarios agrícolas, con tiempo de siembra y tiempo de cosecha.
En las últimas décadas, los antropólogos han destacado los posibles impactos negativos de las festividades de los santos católicos en el desarrollo. Harris (1964) argumentó que estos festivales implicaban «enormes cargas económicas» y comportamientos «irracionales y antieconómicos» que impedían el desarrollo de América Latina. Greenberg (1981) señala que las consecuencias de los festivales para el desarrollo dependían del momento exacto de los gastos del festival en relación con el calendario agrícola.
Para examinar cómo la variación en las festividades religiosas puede tener consecuencias en el desarrollo económico, aprovechamos dos características del entorno. En primer lugar, las fechas de los festivales varían mucho de una localidad a otra. En segundo lugar, el calendario de las principales épocas de siembra y cosecha agrícola también varía enormemente de una localidad a otra. Esto significa que, para algunos municipios, la fiesta del santo coincide con la temporada de siembra o cosecha, mientras que en otros municipios no.
Angel Alvarado: ¿Y eso era algo completamente aleatorio, porque la fiesta de San Francisco en el pueblo tal de Costa Rica es porque el español se llamaba Francisco o porqué su pueblo, en Andalucía, tenía el nombre de Sn Francisco o porque llegaron el día de San Francisco? ¿Entonces eso es algo también aleatorio, de porque se coloca esa esa fiesta, no?
Eduardo Montero: sí, exactamente sí. También otras cosas, muchas veces asignaba el Santo, dependiendo del día que conquistaron el pueblo, entonces también cómo estás diciendo el día que llegaron a un pueblo.
Angel Alvarado: entonces, como no había un estudio para saber si estamos en temporada de cosecha, no puede ser la fiesta patronal, sino que era básicamente algo que era aleatorio.
Eduardo Montero: Exacto.
Angel Alvarado: ¿A través de qué mecanismo actúa la coincidencia de la fiesta con la productividad? Horas dedicadas, inversiones (semillas, fertilizantes), ahorro, retraso de gratificaciones, ¿tentación del consumo de corto plazo?
Eduardo Montero: Nuestra hipótesis es que las fiestas patronales que coinciden con las temporadas de siembra o cosecha afectan negativamente el desarrollo económico a largo plazo.
Durante las temporadas de siembra y cosecha, los hogares necesitan dedicar mano de obra e invertir en la agricultura. Si los hogares tienen limitaciones de tiempo y liquidez, los festivales que se realizan en estos períodos clave pueden desplazar el tiempo y las inversiones financieras en la agricultura.
En la temporada de siembra, los festivales pueden desplazar las inversiones financieras (p. ej., en fertilizantes y semillas), reducir el tiempo dedicado al trabajo agrícola (p. ej., en la preparación de la tierra) y hacer que las comunidades siembren fuera de la fecha óptima de siembra.
En temporada de cosecha, Los festivales también pueden desplazar el tiempo de trabajo de la cosecha o hacer que la cosecha sea demasiado temprana o demasiado tarde. Además, los festivales de la cosecha ocurren cuando las comunidades están llenas de ingresos agrícolas y pueden llevar a una mayor tentación de consumo que los festivales en otras temporadas. Los festivales de la cosecha pueden, por lo tanto, reducir los ahorros para invertir en la próxima temporada de siembra.
A largo plazo, festivales que coinciden con la agricultura conducen por lo tanto a una menor productividad agrícola. La productividad agrícola persistentemente más baja impide la transformación estructural de la economía de la agricultura a sectores modernos.
Angel Alvarado: ¿Cuál es el impacto de la fiesta religiosa sobre el ingreso hoy en día?
Eduardo Montero: Primero investigamos el impacto de los festivales que coinciden con las temporadas de siembra o cosecha en el desarrollo a largo plazo. Encontramos que los municipios con festivales que coinciden con la agricultura tienen ingresos familiares más bajos y también obtienen peores puntajes en un índice de desarrollo económico construido a partir de los resultados del censo mexicano. Los impactos son de gran magnitud: a largo plazo, la coincidencia de festivales reduce los ingresos de los hogares en aproximadamente un 20% y reduce el índice de desarrollo económico en 0,13 desviaciones estándar.
Angel Alvarado: ¿Qué relación tienen la productividad del sector agrícola con la transformación económica?
Eduardo Montero: encontramos que los impactos negativos a largo plazo de la coincidencia de festivales en los municipios mexicanos ocurren debido a los impactos negativos en la agricultura. Los lugares con festivales coincidentes son menos productivos en agricultura. También han experimentado menos transformación estructural: tienen una mayor proporción de la fuerza laboral en la agricultura y una menor participación en los sectores modernos. Estos hallazgos son consistentes con la literatura sobre crecimiento económico, que ha destacado las mejoras en la productividad agrícola y la posterior transición de la agricultura hacia los sectores modernos como aspectos centrales del proceso de desarrollo económico.
Angel Alvarado: ¿Qué efectos tienen las fiestas religiosas arraigadas sobre el capital social, la confianza y la provisión de servicios públicos?
Eduardo Montero: Usamos datos detallados de encuestas del Barómetro de las Américas de 2008 a 2018 y examinamos una variedad de medidas de religiosidad y capital social. Encontramos que los municipios con festivales coincidentes tienen una mayor participación de grupos religiosos y una mayor propensión a decir que la religión es importante en la vida.
Una mayor religiosidad puede conducir a una mayor adhesión a las costumbres y tradiciones religiosas, incluida la celebración y el momento de los festivales, lo que explica por qué los festivales coincidentes no se modifican, incluso si tienen consecuencias negativas para el desarrollo. Por lo tanto, puede existir un ciclo de autorreforzamiento en el que las festividades coincidentes reducen el desarrollo, pero aumentan la religiosidad, y el aumento de la religiosidad ayuda a que las festividades coincidentes persistan.
Angel Alvarado: ¿Qué efectos tienen las fiestas sobre la desigualdad?
Eduardo Montero: También encontramos que las áreas con festivales coincidentes tienen una menor desigualdad de ingresos Posiblemente es una consecuencia del impacto negativo en el desarrollo de los festivales coincidentes, o de más redistribución dado niveles más altos de capital social y religiosidad
Angel Alvarado: ¿Qué efectos tienen las fiestas sobre la migración hoy en día?
Eduardo Montero: Encontramos que los municipios con festivales coincidentes tienen una mayor proporción de la población que trabajo en el exterior cinco años antes usando datos del censo de México. Esto probablemente representa una mayor migración laboral temporal a los EE. UU. Este hallazgo es consistente con trabajos anteriores que hallan que el empeoramiento de las condiciones económicas conduce a una mayor emigración ¿Por qué no cambiar la fecha de la fiesta? ¿O de santo? ¿Cuáles son las fechas más sensibles?
Angel Alvarado: ¿Cómo podrían persistir prácticas religiosas con efectos económicos tan negativos?
Eduardo Montero: Primero, es posible que las comunidades no noten los efectos económicos negativos año tras año de los festivales coincidentes. El efecto negativo a largo plazo sobre la renta media -aproximadamente un 20%- ha surgido a lo largo de los siglos desde la conquista española. Tal efecto a largo plazo sobre el ingreso puede acumularse con el tiempo a partir de pequeñas diferencias en las tasas de crecimiento anual. Por ejemplo, si la tasa de crecimiento económico anual en comunidades con festivales coincidentes es solo un 0,1% más baja, compuesta durante 200 años, esto conduciría a aproximadamente un 20% menos de ingresos medios en localidades con festivales coincidentes.
Además, incluso si las comunidades se dan cuenta de que la coincidencia de festivales tiene efectos económicos negativos, es posible que persistan por otra razón: conducen a una mayor religiosidad y capital social, y menos desigualdad.
¿Qué implicaciones podrían tener nuestros resultados para la política pública? Si una comunidad busca reducir los impactos económicos de los festivales coincidentes, un principio general sería reducir que los compromisos financieros y de tiempo de los festivales desplazan las inversiones económicas contemporáneas.
Los gobiernos pueden establecer plazos para inversiones familiares (p. ej., pagos de cuotas escolares) para evitar conflictos con los períodos festivos, o crear flexibilidad para permitir dichos pagos en diferentes momentos.
Las comunidades también podrían considerar poner límites a los gastos de los festivales, como lo hizo el gobierno colonial en la década de 1790 y al tiempo y esfuerzo que se espera de los hogares.
Si bien es un poco inconcebible en la práctica, las palancas de política en principio también incluyen cambiar las fechas de celebración de festivales para no coincidir con períodos clave en los que existen oportunidades de inversión sensibles al tiempo (como la siembra agrícola y las temporadas de cosecha).
Una implicación adicional intrigante de nuestros resultados es que la provisión de liquidez (por ejemplo, a través de esquemas de ahorro o crédito) durante los festivales podría tener beneficios al reducir el desplazamiento de otras inversiones sensibles al tiempo. La provisión de tal liquidez motiva una institución específica que se observa en muchos países católicos: la práctica de los empleadores de retener una parte de la compensación anual hasta diciembre, cuando se paga un decimotercer salario» (a menudo denominado {aguinaldo}. Estas prácticas brindan liquidez para los gastos de celebración de Navidad y pueden reducir el desplazamiento de otras inversiones económicas. Estas políticas podrían diseñarse a nivel subnacional para celebraciones locales como las fiestas patronales que estudiamos.
Angel Alvarado: Y además entonces ese impacto; el primer canal es la cosecha agrícola que no es una 1 o 2 % anual, por decir un número. Ahora lo que ha pasado en la historia de México es que la productividad agrícola a incentivado la transformación económica en el futuro. Entonces hay un efecto encadenante de la productividad. ¿Qué implicaciones tiene esto hoy en día? ¿Una sociedad post agrícola?
Eduardo Montero: Totalmente, sí, exacto. Pero aquí es cómo puede causar menos productividad agrícola cada año y eso encontramos. De hecho, hasta hoy en día vemos estos lugares, tienen menos productividad agrícola, pero a largo plazo de lo que pensábamos esto, cuando tratamos de analizar esto, el desarrollo económico a largo plazo, como si es algo muy importante esta transformación a través de sectores de la economía.
Cuando un lugar es menos productivo en la agricultura, eso hace más difícil que el sector que crezcan sectores de servicios, por ejemplo, o sectores de más modernos como de producción en otras cosas. Entonces lo que encontramos aquí también es eso, que había menos transformación estructural, como decimos economistas, vemos que hay lugares que tienen estos festivales que coinciden con temporadas de cosecha o de siembra, tiene una mayor proporción de la fuerza laboral todavía en la agricultura, menor participación en sectores modernos, entonces, básicamente de estos hallazgos son consistentes que digamos, no ha habido tanta transformación estructural en estos lugares, básicamente porque causa que la productividad agrícola sea más baja que hace más difícil que pasen los sectores más modernos.
Angel Alvarado: Efectivamente, y eso, bueno, estamos hablando de temas de largo plazo de que entró a la historia entre la cultura en el pasado digamos, pensamos que bajaba la tasa de interés y eso ya podía resolver todos los problemas. La inversión y ya no y a veces ahí estas cosas que han ocurrido a lo largo de la historia y que tiene implicaciones económicas, y también culturales. Cuando esa fiesta coincide con la temporada de siembra. Ese pueblo decide pues no dedicarse a la siembra o dedicar menos tiempo a la siembra y preparar mejor la festividad religiosa ¿Que impacto tiene entonces: sobre la cultura capital social, confianza, provisión de servicios públicos.
Eduardo Montero: Sí, esa es una parte muy importante cuando uno está pensando en estas tradiciones religiosas o cualquier parte de la cultura, solo puede haber, digamos, los efectos que tienen ingresos. También uno tiene que pensar en los defectos que pueda tener, como en los aspectos culturales, el capital social, la desigualdad, otras cosas. Entonces queríamos ver todo junto para tratar de entender los impactos en una manera más general.
Con perspectiva un poco más más grande, digamos, lo que encontramos nos interesó mucho, al tratar de entender qué efectos pueden tener estos festivales, en particular en el capital social, porque tal vez hay como un equilibrio que tal vez es peor para el desarrollo, pero tal vez es bueno para el capital social o tiene otros aspectos positivos, no siempre estar viendo la parte negativa de las culturas, porque la cultura es compleja.
Todo lo que hacemos para ver estos efectos es usar los datos de encuestas del latino barómetro de México, para ver un poco los impactos que tienen estos festivales en el capital social, y lo que encontramos es que los municipios con festivales coincidentes tienen mayor participación en grupos religiosos, mayor capital social, y también la gente en estos municipios la religión es una parte muy importante de su vida, entonces termina siendo que la religión es particularmente importante en estos lugares. Y aunque haya esta coincidencia, tal vez tiende a tener festivales como un poco más grandes, esto causa más capital social, entonces eso lo vemos como parte fundamental de estos festivales, digamos, aunque tengan impactos negativos en el desarrollo, también pueden tener estos impactos positivos en cosas como el capital social o la religiosidad, entonces eso es como una posible explicación de por qué esos festivales en particular que coincidan, han persistido tanto tiempo.
Angel Alvarado: Sí y el capital social, digamos que puede ser la organización de grupos para, digamos, un seguro comunitario, es decir, si alguien se muere, la sociedad está más integrada, más solidaridad, más confianza entre los grupos para organizarse. ¿Y eso también podría tener impacto sobre la provisión de servicios públicos y la gobernabilidad y la gobernanza?
Eduardo Montero: Totalmente, sí, eso es como una parte fundamental de la religión. Estos grupos de ayuda mutua y De hecho que encontramos eso. Hay más participación en grupos de comunidades locales, entonces también eso es una parte muy importante de lo que pueden hacer estos festivales al crear estos lazos en una sociedad. Entonces sí es importante cuando uno ve temas de religión y cultura, tratar de pensar en estos otros aspectos para para entender bien el efecto de las fiestas.
Angel Alvarado: no me parecía tan claro, pero cuando leí me impresionó el tema de la desigualdad, de cómo esos lugares donde la religiosidad está más acentuado tienen impacto sobre la desigualdad ¡que hallazgos tienen?
Eduardo Montero: Algo muy importante como economista, entre desarrollo tal vez y desigualdad, entonces aquí también queremos ver esto, especialmente después de ver algunos de los los efectos sobre capital social. Entonces decidimos ver qué impactos tienen estos festivales, en particular en la desigualdad y encontramos que esos lugares tienen menor niveles de desigualdad de ingresos hoy en día, y básicamente siempre han servido de distribución en una sociedad. Normalmente la gente que dedica mucho tiempo y gastos a las fiestas tienden a ser gente que tiene un poco más de recursos, y entonces puede tener un efecto de redistribución en los festivales en particular, especialmente en épocas donde es particularmente importante. También posiblemente los impactos de desigualdad son a través de estos lazos de capital social que estábamos hablando, entonces eso también posiblemente produce la igualdad, entonces hay posibles mecanismos aquí esto no lo podemos como explicar 100% que sea una cosa u otra, pero si nos pareció muy interesante que quede viéndolo desde esta perspectiva, los festivales coincidentes reducen los ingresos, pero también reducen la igualdad. Entonces hay un trabajo ahí que, o lo hace tan simple, solamente como decir que estos festivales son pésimos para estas sociedades, como no, pero también nos interesa también la desigualdad, entender qué causa la desigualdad, entonces eso también nos parece muy interesante también.
Angel Alvarado: Y, además, bueno, vamos trabajando el largo plazo. Estas fiestas se pudieran establecido hace 400 años o 300 años atrás. ¿Y los efectos los podemos estamos viviendo hoy en día, ¿no? Y uno de ellos es la migración. ¿Qué efecto tiene la festividad religiosa?
Eduardo Montero: La migración es un tema muy importante para la región. ¿Y, queríamos ver qué impactos tienen estos festivales en la migración? Los datos que tenemos de México no son como super detallados de esto, porque es muy difícil medir la migración, pero lo que encontramos básicamente es que estos municipios que tienen festivales coincidentes encontramos que tiene una proporción de la población más alta que trabajó en el exterior hace 5 años, entonces hay más como migración temporal. Básicamente, a Estados Unidos es lo que vemos en los datos.
Y aquí pensamos que puede ser porque esos lugares son un poco más pobres, entonces hay más razón para emigrar o puede ser por otras razones que hay más este rasgo social, entonces hay más conexiones para estos. Esta migración temporal a Estados Unidos para trabajar un rato y regresarse. Eso no podemos ver muy bien el mecanismo, pero si nos pareció interesante entender dar otra. Otra explicación de las muchas que existen porque hay migración temporal de Latinoamérica a lugares como Estados Unidos.
Angel Alvarado: Ya estamos terminando nuestra conversación, pero quedan un par de preguntas que creo que es importante. uno podría pensar, bueno. ¿Por qué no cambiar de Santo o cambiar de fecha? O en fin, el santoral católico cambió después del Concilio Vaticano II, por ejemplo: el pueblo de mi papá es un pueblo que se celebra San Rafael ya no existe en el calendario, pero bueno, allá se sigue celebrando el 24 de octubre de San Rafael. Yo no sé si es coincidente o no pero entonces hay una fiesta del siglo XX también en mi pueblo que es Barquisimeto que es la Divina Pastora, y se celebra el 14 de enero, pero la fiesta patronal se celebra en septiembre para separar los religioso de lo cultural, digamos había exactamente algunos lugares donde ya no existe el Santo, otros donde se cambia la fecha hay alguna experiencia de que se haya cambiado fiestas o tendrá algún impacto? ¿Pudo haber tenido un impacto, ese tipo de cosas? Estamos haciendo una conjetura.
Eduardo Montero: No, claro, sí, sí, un montón de super preguntas muy interesantes que hemos pensado mucho. Primero de la siempre me ha parecido interesante esa pregunta que es natural en un seminario siempre preguntan, pero por qué no cambian el Santo o la fiesta. Pero es muy difícil, eso es un problema de coordinación gigantesco y cambiar la cultura es difícil, es cómo decirle y no sé cómo cambiar. La fecha está inscrita en que es un poco incómoda que pasa cerca de Navidad, por ejemplo, o sea, es muy difícil hacer esos cambios, pero lo que sí es un poco más, tal vez un poco más fácil como decir.
Este ejemplo de celebrar la fiesta patronal en otra época y lo que vemos básicamente con estos datos que tenemos del Santo patrón de cada pueblo, es que si ocurre a veces de que deciden desplazar la fecha de la celebración, muchas veces eso es muy poquito. Es como en general es como tal vez una semana lo cambian, pero si hay como un porcentaje, creo, creo que es como 5% de los pueblos que lo celebran en otro mes y eso es tal vez por las razones que esta vez es un poco más conveniente celebrarlo en otros momentos, nosotros nos pareció interesante eso, pero no es, no pasa muchísimo. Creemos tal vez por las razones que es un poco, es un problema de coordinación también y también es este son fechas sagradas también. Entonces este aspecto cultural lo hace un poco difícil, digamos, si la gente siente que no es, no es lo mismo celebrarlo en otra fecha que no que no nos agrada, entonces lo que vemos y si pasa, pero no es como muy común, pero sí, sí nos pareció interesante que si pasa.
Angel Alvarado: ¿Es algo muy racional, ¿no? ¿cuáles son esas fechas más sensibles? ¿Y por lo tanto, cuáles son los Santos que más no sé si lo tienes, no?
Eduardo Montero: una de las explicaciones de nuestros estudios es que estos períodos de cosecha y siembra es muy importante la liquidez, entonces cualquier cosa que como quitar la liquidez puede causar este un desplazamiento de inversiones. Entonces, para nosotros una implicación es tal vez, cosas que pueden dar liquidez en estos momentos pueden tener impactos positivos, en Costa Rica se tiene el aguinaldo, que es como el salario en diciembre, un salario extra en diciembre. Y las razones porqué de Navidad, es que son momentos donde hay muchas fiestas religiosas, entonces el sentido de dar un poco más de liquidez en esos momentos.
Hacer algo así parecido, dar liquidez en estos momentos puede tener impactos positivos, porque ese es un mecanismo muy importante, así como estaba diciendo antes, si hubiera, o no hubiera estos problemas de liquidez, los efectos no serían tan grandes porque la gente sería como super racional y podría no usar el crédito para otras cosas, pero en realidad en lugares agrícolas hay muchos problemas de liquidez.
Un programa como el aguinaldo en un festival parece pequeño, pero puede tener impactos positivos, cambiar el Santo y cambiar las fiestas…eso nos parece un poco difícil.
Angel Alvarado: ¿Cuantos pueblos en México han estado tienen coincidencias de fechas en tu estudio?
Eduardo Montero: Si nos enfocamos en la zona de Nuevo México y ahí encontramos que son como aproximadamente 11 o 12% de los municipios tienen estos. Este festival es que coinciden la mitad es como en época de siembra y la otra mitad es como en época de cosecha y encontramos que los dos tienen impactos parecidos en el desarrollo a largo plazo. En entonces sí es como un porcentaje relativamente grande de México y después de seguro en otras partes de Latinoamérica.
Pero otra cosa también que quería decir es, pensando en cómo cambiar otra cosa que también es importante es que lo que estábamos diciendo antes que también éstos pueden reducir la desigualdad y crear más capital social, entonces no necesariamente es tan obvio que queremos cambiar estas cosas. Es más que todo tratar de entenderlos y después tratar de pensar en políticas públicas que se adaptan a estas situaciones locales, a estas culturas locales, en vez de tratar de cambiar la cultura de uno solo, porque eso es un difícil, es muy difícil.
El estudio de las religiones que no es tan fácil tiene un montón de impactos diferentes entre sí, entender la cultura y los impactos en la economía. Eso es complejo, entonces, tratando de hacer un poquito de eso en este estudio, pero hay muchas cosas más que estudiar aquí.
Angel Alvarado: Eduardo muchísimas gracias por esta interesantísima conversación y espero que este trabajo este proyecto siga avanzando para entender mucho más el efecto de la religión en América latina. Este caso de la religión católica, con tanto impacto que tiene en la cultura, pero también impacto positivo y no tan positivo en algunos aspectos de la economía. Muchas gracias.
Eduardo Montero: Totalmente, muchas gracias.